Dios
Escucho la propaganda de Noticias por la radio: "Rating y negocios, las nuevas drogas de Dios", refiriéndose al Diego. Y ahí me tildé: las-nue-vas-dro-gas-de-Dios... También lo asocié a la propaganda del Show del 10, donde a él le crecen alas de ángel cuando hace aquel gol con la mano.
Es muy impresionante---> Te enseñan durante 2000 años un Dios infalible, Padre muerto, en tanto no-deseante y eterno. Y sin embargo, algo más antiguo insiste, y pulsa adentro por un dios débil, deseante, padre fallido a quien adorar, como si esas máculas fueran la condición de una adoración incondicional y gozosa. Y más: adoración que no teme.
Necesitaría mucho pensar para entretener alguna idea. Pero por ahora me basta la bella intuición de que esa dialéctica entre nuestros dioses, y no otra cosa, es el soplo divino.